Con 1.843.263 ciudadanos habilitados para votar, este domingo la provincia de Mendoza -el quinto distrito electoral, con el 4,8% del padrón nacional- elegirá gobernador, intendentes, concejales, diputados y senadores provinciales, en un escenario de polarización entre la fórmula radical deAlfredo Cornejo y Laura Montero, que con el sello Frente Cambia Mendoza reúne el apoyo de gran parte del arco opositor, y la de los peronistas Adolfo Bermejo y Diego Martínez Palau, que compiten bajo el paraguas del Frente para la Victoria. El Frente de Izquierda y los Trabajadores, tercera fuerza provincial, aspira allí a seguir creciendo en el distrito con una fórmula integrada por la senadora provincial Noelia Barbeito y Héctor Fresina.

La encuestas vaticinan un ajustado final entre Cornejo, quien resultó el más votado en unas primarias en las que no tuvo competidor, y Bermejo, quien achicó la diferencia luego de imponerse en las PASO ante una fórmula kirchnerista «pura» y otra de extracción sindical. Los números que manejan en el radicalismo auguran un triunfo para Cornejo por un 6% de ventaja, pero con casi 9% de indecisos, mientras que los sondeos que encargados por el peronismo prevén que el radical se impone por un punto, con 5% de indecisos. En el FIT, tercera fuerza provincial, prevén un triunfo radical con un margen de hasta 15 puntos para la coalición que agrupa a la UCR, el PRO, el Frente Renovador, la Coalición Cívica-ARI, Libres del Sur, el Socialismo, el Partido Demócrata y Fe (de Gerónimo «Momo» Venegas), además de partidos municipales.

Cornejo, intendente de Godoy Cruz, y la senadora Montero cerraron ayer su campaña con una caravana por territorio peronista, recorriendo Las Heras y Guaymallén, con la compañía del diputado y ex gobernador Julio Cobos. Ausente con aviso, el senador mendocino y precandidato presidencial Ernesto Sanz -por estas horas, dedicado de lleno a las negociaciones con el PRO y la Coalición Cívica por el cierre de listas- votará el domingo y aguardará en la provincia lo que podría ser la recuperación de la provincia para el radicalismo luego de ocho años de gobierno peronista. «Confiamos mucho en los mendocinos y les pedimos que vayan a votar con tranquilidad y sin presiones; sabemos que hay mucha presión del Estado», dijo ayer Cornejo en una improvisa conferencia de prensa.

La fórmula de Bermejo y Martínez Palau tuvo su cierre en la Bodega Los Toneles, de Guaymallén, donde el senador y el ex ministro de Transporte provincial se mostraron triunfalistas. Días atrás, la primera dama bonaerense Karina Rabolini recorrió la provincia en una muestra del apoyo que, desde el inicio de la campaña, dio el gobernador de Buenos Aires Daniel Scioli a la fórmula y que le costó, a comienzos de marzo, el puesto al histórico operador peronista Juan Carlos «Chueco» Mazzón, obligado a renunciar al cargo de coordinador general de Asuntos Político Institucionales de la Unidad Presidente de la Presidencia de la Nación tras la exclusión de camporistas en el armado de listas. La visita de la presidente Cristina Kirchner a la provincia tras dos años sin pisar suelo cuyano selló la paz con el gobernador Francisco «Paco» Pérez y ayudó a impulsar al binomio que el domingo tendrá el difícil desafío de retener la provincia.

Fuente: infobae.com