El nuevo ministro de seguridad presentó junto al comisario Pablo Bressi y la gobernadora Vidal un millonario lote narco capturado en Pilar. Los desafíos de la nueva gestión.

«¿Ven? Recién tengo 24 horas de ministro», dijo Cristian Ritondo mientras se reía esta tarde en la Departamental de Puente 12, Ciudad Evita. Ayer, acompañó a la mujer del periodista Sergio Hurtado en Areco, a quien le dispuso custodia. A sus espaldas, montados sobre asfalto y bajo un galpón, se exhibían casi cuatro toneladas de marihuana en panes envueltos en cinta aisladoraa un valor de tres mil pesos por kilo, el fruto del operativo «Cofres Verdes», un golpe obtenido por la Superintendencia de Drogas Ilícitas, hasta hace días a cargo del comisario general Pablo Alberto Bressi, nuevo jefe de la Policía Bonaerense. En Ciudad Evita, Ritondo fue acompañado por Bressi mismo y la gobernadora María Eugenia Vidal, especialmente llegada en helicóptero para la ocasión. Fue una presentación en sociedad, en cierta forma: el operativo debut de la gestión del ministro y el jefe Bressi.

Originado por un dato de calle, coordinado por oficiales como el comisario inspector Elías Pinarello -director de la Unidad Especial de Lucha contra el Narcotráfico- y con tareas de inteligencia como invervenciones telefónicas que comenzaron el 13 de enero último, «Cofres Verdes» llevó a detener a una banda de presuntos traficantes paraguayos y argentinos de fuerte prontuario. El nombre del operativo obedeció a una técnica al menos llamativa: la droga fue hallada en un galpón sobre la Ruta 8 en Pilar dentro de pilas de tirantes de madera unidas con sunchos. Los «cofres» mismos estaban tallados dentro de la madera, algo así como un falso hueco para transportar la droga.

Fue una jugada audaz para los traficantes, por otra parte: la marihuana viajó en un único envío desde Paraguay a bordo un camión Iveco, con destinos como Mar del Plata, Quilmes y Monte Grande. Los allanamientos, firmados por el juez federal de Campana Adrián González Charvay en una causa bajo secreto de sumario, seguirían esta noche.

«Hoy estamos mostrando los resultados y ver los réditos de cuidar a quienes nos cuidan y trabajar juntos en esta lucha contra el narcotráfico. La investigación en la causa sigue sigue», afirmó Ritondo: «Nuestro objetivo ha sido tanto en la campaña nacional como en la provincia ha sido ‘paco cero’ y lucha contra el narcotráfico». Luego afirmó que «para esto, elegimos a quien consideramos el mejor policía para este trabajo», señalando a Bressi, quien fue jefe en tres comisarías del Conurbano y miembro del grupo Halcón en su carrera policial.

El comisario general y el nuevo número dos en la Bonaerense, el comisario mayor Fabián Perroni, ex cabeza de la departamental Luján-Rodríguez, fueron los únicos cambios visibles en la cúpula de la Bonaerense hasta el momento, al frente de una fuerza de casi cien mil hombres. La salida del anterior jefe, Hugo Matzkin, era algo anunciado desde hace largo tiempo en los pasillos del Ministerio de Seguridad en La Plata. Algunas voces cercanas a la nueva administración hablan de que Bressi haría cambios en los niveles jerárquicos de la fuerza, de que una revisión de legajos junto a las autoridades actuales estaría próxima. Otros aseguran que es demasiado temprano para hablar. Por lo pronto, Ritondo ya tiene en mente al sucesor de Bressi en Drogas Ilícitas, a quien falta confirmar en el cargo.

Hay otros desafíos. Con apenas un día en el cargo, Ritondo llega tras ocho días de reuniones con el ex ministro Alejandro Granados y su equipo. El nuevo ministro se enfrentó con una realidad que se repite en toda la provincia y que la gobernadora Vidal ya alertó: la falta de caja. Una voz de peso asegura: «Se está igual que en toda la provincia».

También, Ritondo anunciará este viernes, posiblemente desde Pinamar, el operativo de seguridad Sol de este verano para los puntos turísticos bonaerenses. Fuentes del Ministerio estiman entre once y trece mil hombres destinados, con un fuerte rol de los nuevos policías locales entrenados en tiempo exprés en el último tramo de la gestión Granados, por ejemplo en Mar del Plata, donde hay una alta concentración de nuevos efectivos.

El poco entrenamiento de los policías locales fue una preocupación en las mesas de gestión de campaña en Cambiemos, con los programas de seguridad a cargo de Ritondo, Eugenio Burzaco y Guillermo Montenegro con sus respectivos equipos. En la mente de Ritondo ya en el cargo, una vuelta a clases para los jóvenes efectivos está en carpeta. La meta será aumentar los cursos de seis meses a nueve o un año, diversificando las 1200 horas de instrucción con educación suplementaria en códigos jurídicos y un aumento en los disparos de práctica, que llegarán a 250, con sesiones de tiro cíclicas y manejo de móviles. Este esquema, por otra parte, será paulatino, para impedir vaciar las calles de efectivos. Por lo pronto, los jefes de seguridad de los diferentes municipios ya enviaron sus opiniones del nivel de los efectivos en sus distritos. «El panorama es mixto», desliza una voz en el equipo de Ritondo.

Fuente: infobae.com