Nueva Chicago sigue sin poder ganar, conservando la última posición en la tabla, con sólo 7 unidades luego de 16 partidos jugados. Colón, por otra parte, rescató un empate y llegó a los 18 puntos, muy lejos de las posiciones de vanguardia. Ambos equipos aburrieron con un 0-0 que no contó con emociones. Si bien el Sabalero fue el que intentó con una propuesta más ofensiva, le faltó picante para concretar. El Torito, que lleva 762 minutos sin convertir, casi ni pisó el área.

Lo que quedó del 0-0 entre Chicago y Colón es que ambos tienen mucho por mejorar. Muchísimo. En 90 minutos hubo una sola situación de gol -de Colón, un cabezazo de García-, y nada más. Nada más positivo, porque el resto fue negativo.

Más allá de lo pobre que fue el encuentro, quedó la sensación que el Sabalero fue el que más intentó. Buscó, mal, pero buscó. La propuesta del técnico debutante Darío Franco fue pararse en el campo rival. Y así lo hizo: obligó a Chicago a replegarse y jugó lejos de su arco. Pero no tuvo gestación, la creación brilló por su ausencia. Copió lo peor del Torito, la imprecisión.

Y Chicago, que no logra salir del fondo de la tabla, ni logra ganar (lleva ocho años sin triunfos en Primera), ni logra convertir ¡¡suma 762 minutos sin mojar!!, vive un presente preocupante, principalmente, porque no tiene volumen de juego ni se sabe cuál es la idea que tiene Forestello.

Los dos se fueron con tarea para la semana. Hay mucho por mejorar.

Fuentes: Diario deportivo OLE, agencia de noticias TELAM.